Los fantasmas no llaman a la puerta.
En esta historia hemos conocido a dos personajes muy divertidos. Son Oso y Marmota, amigos inseparables que siempre están y juegan juntos. Les encanta buscar tesoros mientas se disfrazan de piratas, jugar a los dardos y bailar.
Pero una tarde, el bonachón de oso decide invitar a pato a casa para jugar todos juntos. A marmota eso no le gustó nada, así que será capaz de hacer lo que sea necesario para evitarlo. ¿Qué enredos provocaran sus alocadas ideas?
Con la lectura de este nuevo cuento trabajamos: la amistad, el egoísmo, los celos, la mentira, excusas y la magia entre otros valores y emociones.
Hemos aprendido que ampliar nuestro círculo de amigos y aceptar a nuevas personas no tiene porque ser negativo. La socialización es muy importante y sobre todo desde la infancia, crear una relación de dependencia con una única persona a la larga les puede perjudicar.
¡¡¡¡ Que susto pensábamos que había fantasmas!!!!
Después nos relajamos como oso, pato y marmota hacían cada tarde.
Y colorín colorado… ¡qué bien todos juntos lo pasamos!
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